El ser humano aprende de las situaciones adversas y el apagón que sufrió España (también Portugal) ha enseñado a buena parte de la población que, quizás, no estaba tan preparada como pensaba ante la ausencia de un bien, la electricidad, que todos nos hemos acostumbrado a utilizar como si jamás nos fuera a faltar.
Más allá de la histeria colectiva a la que algunos se sumaron comprando en el supermercado rollos de papel higiénico y latas de conservas como si no hubiera un mañana, el apagón sí ha dejado claro que hay artículos y bienes de consumo que nunca está de más tener en casa o llevar cuando se sale a la calle. También nos ha recordado esa jornada sin electricidad la importancia de ayudar a los vecinos y de respetar las normas básicas de civismo.
Aunque son muchas las enseñanzas que nos deja el apagón, éstas son 5 de las más destacables:
Las pilas nunca fallan

Entre los artículos que nunca deben faltar en una casa están las pilas, pues éstas nunca nos fallarán, ni durante un corte en el suministro de unos pocos minutos ni durante un apagón de varias horas o de días enteros. Durante el pasado apagón, fueron muchos los españoles que se informaron gracias a la radio de pilas que tenían guardada y casi olvidada dentro de un cajón y también los que hicieron la luz con las linternas que llevaban años sin desempolvar. Tener varios paquetes de pilas siempre es, por tanto, más que recomendable.
A la calle, siempre con dinero en efectivo

Entre la población, especialmente entre los más jóvenes, se está popularizando salir a la calle sin billetes y monedas y pagar todo con tarjeta o con el teléfono móvil. En tiempos en los que las élites gobernantes parecen querer acabar con el dinero físico y de la mencionada moda, el apagón ha sido muy oportuno para recordarnos a todos que siempre se debe llevar dinero en efectivo. Esto se hizo evidente con el corte de la electricidad al no tener comercios y bares la posibilidad de cobrar por medios electrónicos, pero para demostrar la importancia del dinero que se puede ver y tocar no hace falta ponerse en un extremo como ese. Basta con imaginar que a alguien que paga con el móvil se le acaba la batería o que el que tira de tarjeta la pierde justo cuando tiene que hacer un pago importante.
Alternativas para iluminar la casa

Cuando se hace la noche y no hay electricidad, todo se hace más llevadero si se dispone de algún medio o herramienta para hacer la luz. Linternas de pilas, velas o lámparas que funcionan con batería son, junto a los teléfonos móviles hasta que se quedan sin carga, algunos de los elementos que cobraron protagonismo durante el pasado apagón y que no todos los españoles tenían en sus hogares. Es seguro que, después de lo ocurrido, serán pocas las casas en las que no haya al menos una linterna con las pilas operativas.
La radio, el medio más fiable

Ni la televisión, ni la prensa digital, ni las redes sociales. El medio que informó a la población durante el apagón fue la radio, por ser el único de los que siguió informando que podía captarse en tiempo real por un dispositivo que no necesitaba la corriente eléctrica: los transistores a pilas. Los que tenían uno de estos aparatos en casa pudieron mantenerse al tanto de la actualidad y pasar las horas sin luz de forma más amena. La demanda de transistores capaces de funcionar con pilas fue una de las consecuencias de la jornada sin suministro eléctrico.
Es posible entretenerse sin el teléfono móvil

Aunque parezca una obviedad, ha hecho falta un gran apagón para que muchos se dieran cuenta de que es posible entretenerse y divertirse sin necesidad de tener el móvil en la mano. Las imágenes de adolescentes charlando y mirándose a la cara, los paseos sin hablar por teléfono, las partidas de cartas en las casas y las tertulias vecinales en la calle o en el patio de luces nos devolvieron a un tiempo pasado que creíamos perdido para siempre.