La participación en el sorteo de la Lotería de Navidad de niños de San Ildefonso de raza negra o latina, que cada año es mayor, ha desencadenado una oleada de mensajes racistas en las redes sociales y ha dejado claro que todavía son muchos los españoles que consideran como inferiores a determinados seres humanos simplemente por tener éstos la piel más oscura.
«¿Las nigerianas se sortean?» / «A recoger algodón» / «Echen Cucal y pongan niños a cantar como Dios manda» / «Ojalá hiciesen un baile de esos de su país para celebrar cada premio» y «No sabía que en Senegal había Lotería de Navidad» son algunas de las frases que se colaron entre los comentarios al sorteo en la página de RTVE.
Los mensajes racistas no afloraron sólo como comentarios a la retransmisión en las páginas de los medios, pues también hubo usuarios de la red social X (antes Twitter) que dedicaron mensajes en su propio perfil a expresar su disconformidad ante el crisol de razas que veían en televisión o, lo que es peor, a burlarse de los niños a los que ven como diferentes.
«¡Qué necesidad de amargarme el sorteo! El único negro que debería ver es el del chocolate», comentó Isabel Peralta (@IsabelPera18), una joven que no tiene inconveniente en mostrarse como racista y abiertamente neonazi en su perfil de X.
Algunos recurrieron al humor y a la ironía para sus burlas racistas hacia los niños de San Ildefonso, algo que no hace que sus mensajes sean menos graves y generen menos indignación. «Salta Ecuador al terreno de juego», escribió Jose (@odiociclista) como comentario a una foto en la que se observa a los menores que participaron en el sorteo desfilando en fila ante los bombos.
Por supuesto, los autores de los mensajes racistas encontraron la respuesta de muchos otros tuiteros que les afearon su conducta y pusieron en duda su inteligencia. Algunos de ellos reclamaron a las plataformas un mayor control sobre este tipo de contenidos que fomentan el odio en las redes.
Un número con simbología neonazi
Aunque es sólo una anécdota fruto del azar, el número agraciado con el Gordo de la Lotería de Navidad (88008) generó también multitud de comentarios en las redes sociales por algo más que por la propia fortuna que llevaba pareja y es que el 88, cifra con la que arranca el mencionado número, tiene un gran valor simbólico para los neonazis, por ser la H la octava letra del alfabeto y la que, por partida doble, muestra las iniciales del saludo Heil Hitler.
Algunos simpatizantes de la extrema derecha alardearon incluso de haber comprado décimos con números que comenzaban o terminaban con 88, precisamente, por ese motivo y que recalcaron el carácter hitleriano del 88008.