Son muchos los anuncios de los años 80 y 90 que, por la imagen que ofrecen de la mujer, serían impensables o al menos muy difíciles de emitir hoy en día y uno de los ejemplos más claros es el de la colonia para hombre Jacq’s que, en sus tres versiones, pequeños matices al margen, muestra a una chica que luce de forma ostentosa sus atributos femeninos y que busca a un hombre misterioso llamado Jacq’s.
La primera de las tres versiones de esta historia data del año 1986 y es la modelo Jo Bennett quien, enfundada en un mono rojo y a lomos de una moto, encarna a la protagonista que busca a Jacq’s, a quien ella misma, tras anunciar su deseo de encontrarlo, define como un hombre “alto, fuerte, muy especial y que no retrocede ante nada” y que, por supuesto, “deja tras de sí un aroma único”. No son sus palabras, sin embargo, lo que fijó este anuncio televisivo en la memoria de la mayoría de los hombres españoles de la época sino, más bien, el momento en el que la chica se baja la cremallera de su atuendo para ofrecer a la cámara un generoso plano de sus pechos.
Con los pechos femeninos como protagonistas y con una trama similar pero con ligeros cambios, llegó la segunda versión del anuncio, que data de 1994 y que tiene la modelo Mónica Van Campen como protagonista. La chica, en esta ocasión, no es la motorista, sino que es el propio Jacq’s quien llega en este vehículo a una especie de fiesta de disfraces en la que ambos coinciden. En cuanto localiza al hombre al que busca y este se dirige hacia ella, la mujer, enfundada en un traje de cuero negro sospechosamente similar al de la Catwoman encarnada en el cine por Michelle Pfeiffer en la película Batman Vuelve de 1992, se baja la cremallera.
Como curiosidad poco conocida, cabe mencionar que este segundo spot fue dirigido por la cineasta Isabel Coixet, que confesó hace poco en el programa La Resistencia que no lo pasó nada bien con ese trabajo. “Recuerdo que eran tiempos duros y que le decía a la actriz, Mónica Van Campen, muy amiga mía, algo así como: lo siento, Mónica, pero los de la agencia quieren que te bajes más la cremallera’. Eran otros tiempos, tiempos duros… yo era joven”, le dijo a David Broncano.
La tercera versión, aunque prescinde del momento bajado de cremallera, sigue otorgando un importante peso a la anatomía femenina de la protagonista y es que, en esta ocasión, la joven luce un generoso escote desde el primer momento. La chica, que se desplaza en moto, termina por encontrar a Jacq’s, que aparece al volante de un descapotable.
