Fue uno de los mejores delanteros españoles de su época, se hizo con el Trofeo Pichichi de la temporada 2001 y 2002 y alcanzó la categoría de mito para los aficionados del Deportivo de La Coruña, pero el exfutbolista Diego Tristán, en el homenaje a Joaquín disputado esta semana, no fue protagonista por su calidad con el balón, de la que todavía guarda algo de esencia, sino por el sobrepeso que denota su aspecto físico.
La irrupción de Tristán en el partido no dejó indiferente a nadie, aunque las reacciones a la aparición del mítico exjugador de clubes como Mallorca, Deportivo y Cádiz fueron de lo más diversas. Es cierto que fueron muchos los que se mofaron de su gordura, pero también lo es que muchos otros denunciaron esa gordofobia y destacaron la personalidad que demostró Tristán al participar en el homenaje pese a su apariencia, así como el hecho de que, pese a estar pasado de kilos, enseñara detalles de la clase que en su momento mostró en los más grandes escenarios de España y Europa.
«Ese señor con sobrepeso al que han presentado al grito de Diego Tristán, hubo un tiempo que se meaba a cualquier delantero de su época, o casi», escribió El Taraotarantino (@Taraotarantinoo), en recuerdo del glorioso pasado futbolístico de la persona pasada de peso con la que se estaba cebando una parte de la comunidad tuitera.
Muchos de los que sucumbieron a la tentación de dejar un comentario en las redes sociales ante la aparición de la versión con sobrepeso de Diego Tristán lo hicieron para recordar que no está bien meterse con las personas por su aspecto físico y que, en todo caso, hace tiempo que el exjugador dejó la práctica del fútbol a nivel profesional y, por tanto, el compromiso de cuidar su estado de forma. Eso sí, otros recordaron que, ya en su época de futbolista de primer nivel, la disciplina nunca fue el fuerte del genial delantero nacido en la localidad sevillana de La Algaba.
Un genio con el balón
Durante el tiempo en el que estuvo en activo, especialmente cuando vistió los colores blanquiazules del Deportivo de La Coruña, Diego Tristán fue todo un depredador del área con clase. Pocos tenían su capacidad para definir, para girarse y para realizar controles y remates que otros ni se plantearían, suertes que manejó ante los más grandes equipos del continente europeo, a los que el club coruñés se midió en las sucesivas temporadas en las que disputó la Champions League.
En cuanto a los títulos conseguidos, además del mencionado Trofeo Pichichi en el plano individual, cabe destacar, en lo colectivo, la famosa Copa del Rey del Centenariazo, ganada por el Deportivo al Real Madrid en el estadio Santiago Bernabéu el día en el que el club merengue cumplía 100 años. Con el equipo coruñés, Tristán ganó también dos Supercopas de España y llegó hasta las semifinales de la edición de la Champions League de la temporada 2003-2004.
A pesar de su evidente sobrepeso dejó un par de detalles de su clase.
No entiendo las burlas, son estúpidas.Cada uno tiene el cuerpo que quiere o que puede.
Como estarán ellos y ellas dentro de 10 años