Que a Isabel Díaz Ayuso le gusta pelear con la oposición y con los colectivos más críticos con su gestión es algo por todos conocidos y, ahora, la presidenta de la Comunidad de Madrid ya cuenta con un cinturón negro que acredita su carácter guerrero, concretamente el honorífico que le ha concedido la Real Federación Española de Judo.
Al recibir el cinturón, ataviada con el pertinente kimono, Ayuso comparó los valores que transmite el judo con los valores que ella quiere imprimir a su gestión al frente del Gobierno de la Comunidad de Madrid. “Es todo un honor que me hayan entregado la máxima categoría de este deporte con la que, entre otras muchas cosas, se distingue la precisión, la técnica y el control, es decir, el ser cada vez un poco mejor”, declaró, para destacar después valores como “el sacrificio, la perseverancia y el equipo”.
La presidenta madrileña quiso también resaltar la preocupación de su Gobierno por el deporte, algo que se traduce en la inversión en programas e instalaciones para facilitar la práctica de diferentes disciplinas. «El deporte tiene muchos beneficios añadidos, especialmente para la salud, y por todo ello, desde la Comunidad de Madrid vamos a seguir incrementando ayudas a federaciones, clubes y deportistas de los 179 municipios de la región”, apuntó Ayuso, convencida de que “el deporte y el turismo son un tándem ganador”.
Los encargados de entregar el galardón a Ayuso han sido el presidente de la Real Federación Española de Judo y Deportes Asociados, Juan Carlos Barco, y la presidenta de la Federación Madrileña de Judo, Neli Lorenzo. La Comunidad de Madrid tiene más de 25.000 licencias de judo concedidas y 255 clubes de este deporte, que cuenta con destacadas figuras femeninas como Saray Padilla, Carla Urbasar, Marta García o María Gómez Antona.