Los historiadores del deporte carecen de pruebas concluyentes acerca de los motivos que llevaron a los fundadores del Fútbol Club Barcelona a escoger los colores azul y grana para la camiseta del equipo, si bien la teoría más extendida es la de que esa elección obedece al deseo de imitar la elástica del Basilea suizo, en el que llegó a jugar el también helvético Hans Gamper, la persona que encabezó a ese grupo que, en 1899, inició una de las dinastías más laureadas del deporte.
Sólo una pequeña referencia de uno de los presentes en la reunión fundacional, celebrada en la sala de armas del barcelonés Gimnasio Solé, hace alusión a esa coincidencia entre el equipo catalán y el suizo, si bien no queda claro en absoluto si lo hace como mención de una simple curiosidad o si la importancia de ese detalle es algo más que una anécdota.
“Los colores azul y grana son, si no estamos equivocados, los mismos que los del FC Basilea, al que ha pertenecido hasta hace poco el ex campeón suizo Hans Gamper, nuestro estimado amigo”, había expuesto Narciso Masferrer.
El club, que siempre se caracterizó por hacer gala del sentimiento catalanista frente al centralismo que personifica el Real Madrid, vistió el blaugrana en su camiseta prácticamente a lo largo de toda su historia. Sí hubo variaciones en los pantalones, que fueron blancos en la primera década de vida del club, posteriormente negros y, finalmente, desde 1920, azules. También hubo temporadas recientes en las que los calzones fueron rojos.
Orgullo catalanista en el escudo
El emblema del Fútbol Club Barcelona está basado en el escudo de armas de la ciudad y condensa el orgullo del club de pertenecer a Cataluña y a su capital, un sentir que, pese a la globalización del deporte del balompié, todavía impregna el devenir de la institución.
El escudo, que, con pequeñas variaciones, mantiene su forma desde 1910, incorpora en su parte superior la cruz de Sant Jordi, a un lado, y la bandera catalana, con sus franjas rojas y amarillas, al otro. En la parte inferior, sobre los colores blaugranas, se ubica un balón de fútbol como los que se usaban antaño. Separando los elementos superiores de los inferiores, aparece una franja en la que figuran las iniciales del club (FCB).
Sin publicidad hasta 2006
Otra de las características que definen la historia de la camiseta del Fútbol Club Barcelona es que la elástica culé es una de las que más tardó en mancharse con publicidad y es que no fue hasta 2006 cuando los directivos del club tomaron la decisión de incluir un sponsor que, en aquella ocasión, además, no era ni mucho menos de una marca comercial, sino de UNICEF.
Pese a lo romántico y ético que resultaba no llevar publicidad o, al menos, llevarla de una organización humanitaria que ayuda a los niños del mundo, las exigencias del fútbol moderno llevaron al club a venderse a los intereses comerciales y, por cierto, con bastante polémica, ya que el anuncio elegido fue el de Qatar Foundation, una fundación vinculada a un país que no se caracteriza precisamente por ser un ejemplo de respeto a los derechos humanos y que, aún hoy, genera una gran controversia por haber sido elegido para organizar el próximo Mundial.
En la actualidad, el sponsor de la camiseta es Spotify, una empresa sueca de servicios multimedia fundada en 2006, cuyo principal producto es una aplicación empleada para la reproducción de música vía streaming. Esta empresa, en virtud del acuerdo de patrocinio, también ha unido su nombre al del estadio del Barça, que ahora se llama Spotify Camp Nou.