La propiedad del Deportivo de La Coruña ha emitido un comunicado en el que descarta por completo la venta del club y lo hace en medio de un clima convulso tras los fracasos deportivos e institucionales y pese a que Abanca, entidad bancaria que es la accionista mayoritaria, recogió en las memorias anuales que remitió a la Comisión Nacional del Mercado de Valores sus planes para deshacerse del club para intentar recuperar la inversión.
Con su comunicado, la propiedad del Deportivo sale al paso del que emitieron los aficionados a través de la Federación de Peñas del Deportivo y de los grupos Riazor Blues y Old Faces. Los seguidores del Deportivo, en su misiva, habían amenazado con movilizarse si el club seguía sin ofrecer explicaciones acerca del futuro que se cierne sobre el Dépor tras la marcha de todo el Consejo de Administración y después del despido de Rubén de la Barrera, un entrenador muy querido por los deportivistas.
«El accionista mayoritario del RC Deportivo ha ratificado su posición a largo plazo respecto al mismo, descartando por completo la venta, por muchos interesados que haya, dentro de la hoja de ruta de esta entidad centenaria», recoge el comunicado del club, que invita al deportivismo a que «minimice el estado de preocupación en torno a la entidad», algo que, añade, «en nada beneficia a los principales proyectos que están sobre la mesa ahora mismo: la creación del equipo directivo del área deportiva y la sustitución de la Junta Directiva».
«El accionista mayoritario del RC Deportivo ha ratificado su posición a largo plazo respecto al mismo, descartando por completo la venta, por muchos interesados que haya», recoge el comunicado del club
La marcha de todo el Consejo de Administración y la destitución del entrenador Rubén de la Barrera, según expone la entidad blanquiazul en el comunicado, no afectarán en la preparación de la próxima temporada, debido a que la estructura del club es lo suficientemente fuerte como para funcionar de forma relativamente normal pese a la situación de interinidad en la que se encuentra sumida.
«La solvencia y solidez de la estructura profesional del RC Deportivo permite a la entidad mantener su normal funcionamiento en todos los ámbitos y que no se produzca ningún tipo de alteración en su día a día, reafirmando su vocación de continuidad en todo lo que desarrolla», asegura el club,
Cambio de rumbo o juego al despiste
Lo cierto es que el comunicado del club llamando a la calma dice exactamente lo contrario a lo que Abanca expuso en las memorias anuales que remitió a la Comisión Nacional del Mercado de Valores. En aquel documento, la entidad bancaria que posee la mayoría del paquete accionarial del club expone que su intención es vender el Deportivo y, además, reconoce que, desde que se hizo con la propiedad del mismo, su deseo nunca fue otro que el de recuperar la inversión realizada mediante esa operación.
«La operación de capitalización de deuda se formalizó con el objetivo de participar en la gestión y reestructuración de la sociedad, poniéndola en valor en el menor plazo posible y establecer un plan de venta para dar entrada a nuevos socios y recuperar la inversión realizada», recogía Abanca en sus memorias anuales.