¿Una provocación o el simple deseo de apoyar a uno de los equipos de Madrid en un partido decisivo? La presencia de Rocío Monasterio, diputada en la Asamblea de Madrid por el partido VOX, en el palco del estadio de Vallecas para presenciar el choque que midió al Rayo Vallecano y al Betis en una de las semifinales de la Copa del Rey ha generado un gran enfado entre la afición local, entre la que predomina la ideología de izquierdas, que dirigió cánticos de reproche e insultos durante casi todo el encuentro.
Lo cierto es que Monasterio no hizo más que recoger el guante de una invitación que la directiva del Rayo Vallecano también había dirigido a otros políticos, como la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y el alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida. Ni Ayuso, madridista confesa, ni Almeida, reconocido colchonero, aceptaron un convite al que la conocida política de VOX sí respondió afirmativamente.
«Un honor volver a ver al Rayo Vallecano en Vallecas. ¡Felicidades al Betis por su victoria! Nos vemos en la vuelta», comentó la de VOX en su cuenta de Twitter, en la que también compartió fotos tomadas durante el partido en las que aparece con una bufanda del Rayo y con una mascarilla con la bandera española.
Esta no es la primera vez que la presencia de VOX en el palco del estadio de Vallecas desata el descontento de los seguidores de un equipo que, desde siempre, se ha identificado con la la ideología de izquierdas, algo que asumen como propio sus famosos ultras, los Bukaneros. En la temporada pasada, el líder del partido, Santiago Abascal, y la propia Rocío Monasterio asistieron a un partido entre Rayo y Albacete en el que, por si eso fuera poco, jugaba Zozulya, que llegaba a Vallecas con el rival después de que la propia afición del Rayo boicoteara su fichaje por el equipo del barrio madrileño debido a su supuesta afinidad con grupos de extrema derecha.
Guerra entre los Bukaneros y la directiva
La presencia de Monasterio en el estadio vallecano llega en plena guerra entre los radicales rayistas y la directiva que encabeza el presidente Raúl Martín Presa, precisamente quien invitó al palco a la diputada de VOX. El hecho de que el actual entrenador del equipo femenino del club, Carlos Santiso, siga en el cargo después de que salieran a la luz unas grabaciones en las que animaba a los jugadores de uno de sus anteriores equipos a perpetrar una violación grupal «como los de la Arandina» fue la gota que colmó el vaso.
Mientras los Bukaneros acusaron a Martín Presa de tolerar la incitación a la violación, los responsables de seguridad del estadio impidieron que los ultras accedieran al partido con todos aquellos materiales que incorporaran sus imágenes o nombres identificativos.
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