Un ciclista de 54 años resultó herido de gravedad tras recibir un disparo de un cazador que lo confundió con un jabalí. Los hechos ocurrieron en una zona boscosa perteneciente al municipio de Forallac, en la comarca Baix Empordà de la provincia de Girona.
Los agentes rurales con competencias para investigar este tipo de sucesos trabajan en la hipótesis de que los hechos estuvieran motivados por una negligencia del cazador, pues sospechan que éste efectuó el disparo sin tener una visión clara del objetivo.
El cazador, que ya ha respondido a las preguntas de los agentes como sospechoso de haber cometido un delito de lesiones por imprudencia grave, tiene 52 años y, según los resultados de la prueba de a la que se le sometió, no estaba bajo los efectos del alcohol cuando ocurrió el suceso.
Fueron los propios cazadores los que avisaron al teléfono de emergencias 112 inmediatamente después de que el ciclista fuera abatido con el disparo de uno de ellos, cerca de las 10.00 horas del pasado domingo. Los servicios sanitarios que se desplazaron al lugar atendieron a la víctima sobre el terreno para después decretar su traslado al hospital Josep Trueta de Girona, en cuya Unidad de Cuidados Intensivos ingresó en estado crítico.
Dos muertos por accidentes de caza en menos de un mes
El ciclista herido de gravedad engrosa una lista de víctimas de accidentes de caza que incluye dos muertos en menos de un mes: el hombre de 74 años que falleció tras recibir un disparo de su hermano durante una cacería nocturna en la provincia de Toledo y el cazador de 54 años que murió por el rebote de una bala disparada por un compañero en una batida de jabalíes en el concejo asturiano de Cabranes.
A ellos hay que sumar también la mujer de 75 años que murió en la localidad guipuzcoana de Deba tras recibir, cuando se encontraba dentro de su domicilio, el impacto en la cabeza de una bala disparada por un cazador que participaba en una batida de jabalí.